BLANCO
EDITORIAL: Arte más allá del paralelo 53º
La experiencia de este territorio fue registrada por cronistas, escribanos, naturalistas, pintores y fotógrafos como observadores de un territorio desconocido, en un esfuerzo por comprender “eso otro” que existía, habitaba y aún se despliega aquí en este espacio austral. Esta se escribió con letra de colonizador en la historia de la región, enfrentando sus avatares. Por otro lado, hoy conocemos que las fuerzas de la naturaleza presentes en el territorio se encontraron desde siempre integradas de la espiritualidad de los pueblos originarios que vivieron aquí por siglos. Hoy las razones para adentrarse en el territorio austral que comprende desde el Golfo de Penas hasta el polo sur, han variado. El territorio ofrece una experiencia única, en relación a la intimidad de los sentidos y la inmensidad de lo contemplado. Explorar el territorio austral comprende en sí mismo un desafío por llegar a conocer y experimentar esa lejanía donde “no se puede ir más lejos”.
Su naturaleza auténtica, dramática y topográfica, resurge al contemplar los canales, los fiordos, las pampas que parecen capturar y mantener detenidas en el tiempo estas historias remotas. En este sentido, hay una melancolía que aparece y emerge del paisaje, y que se presenta ante nosotros como presente e imaginaria a la vez. El filósofo Walter Benjamin hablaba del Aura como la manifestación irrepetible de una lejanía -por cercana que esta pueda estar-. Esta aparente contradicción, parece ser una cualidad que obliga a verse afectado por aquello que se contempla.
De esta manera, la producción artística en relación el territorio que habitamos, sería un espacio posible y pertinente para desplegar nuevas sensibilidades, pero que además nos exige hoy, como contemporáneos, nuevas maneras de percibirlas, reflexionarlas e interpretarlas.
La Revista Aura Austral, hace también referencia al nombre de la Aurora Austral, fenómeno visual y magnético de la luz que transforma los cielos polares, una rara fantasmagoría que ocurre en la latitud 60º de un continente lejano, el más lejano de todos: la Antártica.
En cada número, las voces de la revista pretenden presentar las formas de mirar el territorio de Magallanes, la Patagonia Austral y la Antártica, por medio de las imágenes y los imaginarios que se desencadenan en la Patagonia hasta el polo sur.
Este primer número BLANCO presentará el territorio desde una visión de la luz, lo etéreo y el territorio Antártico. Daremos una mirada profunda a la obra de luz que realiza el Colectivo ÚltimaEsperanza integrado por Sandra Ulloa y Nataniel Álvarez y revisaremos la conquista real e imaginaria de la Antártica por Francisco Coloane.
En la sección Arquitecturas imaginarias, conoceremos una propuesta para el Centro Antártico Internacional que no se realizará, y en la sección Crítica Cultural, la insistencia de la Casa La Porfía por dar espacio al arte y el diseño en Magallanes.
También, presentamos nuestro Diccionario Geopoético de la Patagonia, una creación colectiva que pretendemos enriquecer con las miradas sensibles de lectores y escritores. Bienvenidos.